El verano según Gray Malin

Hace unas semanas paseando por el centro de Madrid me topé con una galería de arte en cuyo escaparate descubrí una fotografía que me traslado inmediatamente al verano. Al instante comenzé a sentir la brisa del mar, el olor a bronceador, gritos de niños, el sonido del mar y el calor del sol en mi piel. Tan solo fue un momento, pero lo suficiente como para querer indagar sobre el origen de esta fotografía.

El joven fotógrafo norteamericano Gray Malin está detrás de las imágenes frescas y coloridas que os muestro hoy. Hace unos años dejó atrás su país natal para fotografiar el mundo subido a un helicóptero. Esto le ha permitido definir su estilo y mostrarnos el mundo de una forma sorprendente e irreal. Hasta el momento ha podido inmortalizar ciudades como Chicago, Sydney, Miami e incluso la Antártida, y hace poco menos de un año le tuvimos en España fotografiando la costa de Barcelona y Tarragona en una colaboración con una cadena hotelera.

Sus instantáneas más conocidas son las de playas y costas de todo el mundo a vista de pájaro en la que se distinguen los colores más reconocibles del verano. Una amalgama de toallas, flotadores, sombrillas y bañistas -en ocasiones formando un patrón- que se convierten en imágenes hipnoticas para el espectador. Las costas Miami, Rio de Janeiro, Sydney y Rimini en Italia han cautivado nuestras retinas con una exposición de colores que van desde el azul del mar a llamativos colores flúor.

Con menos de 30 años, Gray Malin se ha hecho un hueco entre los fotógrafos más reconocidos del mundo gracias a estas fotografías tan veraniegas tomadas desde el cielo y que desde hace un mes podemos disfrutar reunidas en el libro Beaches, de la editorial Abrams.